BEUC ha preparado un informe en el que se dan a conocer algunas de las prácticas fraudulentas que se pueden encontrar en las etiquetas alimentarias. Principalmente la atención se centra en el etiquetado de productos industriales donde se alude su carácter artesanal, el uso de imágenes de frutas y verduras en productos que apenas contienen estos alimentos, y en las declaraciones de grano entero en productos que apenas contienen fibra.
La llegada de insectos a los comercios españoles para el consumo humano es ya una realidad, aunque la legislación vigente sólo permite vender los producidos en algunos países extranjeros e impide, en la práctica, vender los nacionales.
No existe un juego limpio en el mercado de la alimentación como para poder elegir, totalmente por nosotros mismos, qué es lo que queremos comer. Esas decisiones las toma alguien por nosotros sin que nos demos cuenta.
Foodwatch Holanda ha puesto en marcha una campaña para pedir que en los Países Bajos se introduzca el impuesto de los refrescos. Esta organización informa sobre la incidencia de las enfermedades asociadas al abuso del consumo de azúcar, el sobrecoste sanitario que ello genera, por eso considera necesario que se introduzca el gravamen y se eviten las regulaciones voluntarias que han demostrado no tener ninguna efectividad.