Once años después. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo (TEDH) ha condenado este martes a España por imponer una pena de cárcel a dos manifestantes que quemaron una foto gigante de los Reyes en Girona en el año 2007 en una plaza. A juicio del tribunal ello constituyó "una injerencia en la libertad de expresión que no fue proporcionada con el fin perseguido".