Recientemente, la Asociación Médica Australiana (AMA) volvió a solicitar al Gobierno de Australia que introdujera el impuesto de las bebidas azucaradas, argumentando todos los beneficios que ello conllevaría. A pesar de que son muchas las organizaciones que piden medidas como el gravamen, el Gobierno se mantiene firme y asegura que no introducirá el impuesto.