La discusión sobre el acceso al aborto vuelve al Tribunal Supremo de Estados Unidos medio siglo después. Sus nueve jueces escucharán este lunes los argumentos del Departamento de Justicia y de los proveedores de servicios abortivos contra la ley de Texas, que desde septiembre prácticamente prohíbe a las mujeres de un Estado del tamaño de Francia ejercer su derecho constitucional de interrumpir el embarazo.