Los casos de vulneraciones graves de derechos sexuales y reproductivos están llenos de mujeres pobres, campesinas, indígenas, gitanas, con discapacidad, mujeres siempre precarias y eso no es casualidad.
La Corte Interamericana de Derechos Humanos dio a conocer el pasado 30 de noviembre, la sentencia que emitió en el caso de Manuela contra El Salvador, mediante la cual halló a este responsable por la detención, condena y muerte de una mujer que había sufrido un aborto involuntario como consecuencia de una emergencia obstétrica.