Una condena clara y explícita contra la destrucción deliberada de las universidades palestinas en la franja de Gaza y los ataques a profesorado, estudiantes y personal universitario que se han llevado y siguen llevándose a cabo por Israel.
Una exigencia de alto el fuego inmediato y permanente que permita todas las intervenciones humanitarias necesarias en la franja de Gaza.
La dotación de recursos económicos para la recepción y protección de estudiantes y personal académico en Palestina actualmente en situación de riesgo, y para la participación en la reconstrucción de las universidades de Gaza, así como la adopción de medidas para contribuir a la recuperación de sus centros y programas de enseñanza.
Revisar y suspender cualquier colaboración con las universidades e instituciones israelíes que se relacionen o sean conniventes con el genocidio en Palestina, practiquen el apartheid o contribuyan a la expansión, colonización, anexión, expolio de recursos y modificación de la composición demográfica del Territorio Palestino Ocupado, por ser contrarias al Derecho Internacional. Asimismo, revisar y en su caso suspender toda colaboración con empresas y bancos españoles o extranjeros que colaboren con los intereses militares de Israel o con sus políticas de ocupación.