Máster en Alimentación, Ética y Derecho

Cátedra UNESCO de Bioética

Contacto

 

El Consejo de Gobierno aprueba el Código ético de integridad y de buenas prácticas de la Universidad de Barcelona

10.10.2018

El Consejo de Gobierno ha aprobado hoy, con 32 votos a favor y 6 votos en blanco, el Código ético de integridad y de buenas prácticas de la Universidad de Barcelona, después de incorporar las observaciones y modificaciones de los diferentes colectivos de la UB, entre los que ha participado la Dra. María Casado, titular de la Cátedra UNESCO de Bioética y directora del Observatorio de Bioética y Derecho (OBD) de la Universidad de Barcelona (UB). El catedrático y presidente del Comité de Ética, Norbert Bilbeny, ha recalcado que el nuevo documento no tiene carácter de normativa legal, sino que quiere orientar los derechos y las obligaciones de los colectivos de la Universidad y dar soporte. «Es una declaración de carácter general de los principios que rigen la UB y una suma de buenas prácticas», ha dicho Bilbeny.

El nuevo Código ético entiende por buenas prácticas el conjunto de reglas, recomendaciones y compromisos que los colectivos de la UB han de tener en cuenta para favorecer las excelencia en diferentes ámbitos de la Universidad y prevenir problemas de integridad en el ejercicio personal de sus actividades. El área de aplicación del código abasta los ámbitos de la investigación, la docencia, el aprendizaje, las publicaciones, la comunicación o la gestión, entre otros.

La libertad académica, la responsabilidad profesional, la integridad científica y académica, la honestidad, la igualdad de derechos, el respeto, la privacidad y confidencialidad, la sostenibilidad y las relaciones solidarias, y las posibles conductas de riesgo son los apartados que componen el Código ético, la interpretación del cual corresponde al Comité de Ética de la UB.

Por ejemplo, en el apartado 3, sobre la Integridad científica y académica, el artículo 3.4 recoge: «El plagio es la forma más grave de apropiación de la autoría intelectual. El plagio es considerado a la Universidad una mala práctica, independientemente de las responsabilidades legales que puede comportar. Es igualmente una mala práctica permitir que otra persona se beneficie de un trabajo sin ser coautor o se deje firmar como coautor a quien no lo ha sido».

Dentro de la sección de Igualdad de derechos, el artículo 5.3 apunta que «Las autoridades académicas han de defender y garantir el derecho a la igualdad y el respeto para la diversidad, tomando las medidas necesarias para evitar en el sí de la Universidad la discriminación, la intolerancia o las trabas para el libre debate». En el apartado 9, relativo a Conductas de riesgo, el artículo 9.1 apunta que «No es admisible la compraventa de trabajos académicos como exámenes, ejercicios, ensayos, trabajos finales de grado o máster o tesis doctorales».

Después de la aprobación del Código ético, se prevé impulsar normativas específicas en diferentes ámbitos de la institución y garantir la difusión y aplicación de este documento.

En otro punto del orden del día, el vicerrector de Personal Docente e Investigador, Josep Batista, informó de los nuevos criterios y requisitos para la ordenación del profesorado acreditado a cátedra. Batista se ha mostrado confiado en que de cara al 2020 ya se habrá vaciado la bolsa de este profesorado.

El Consejo de Gobierno también ha dado su visto bueno al reglamento de la Facultad de Educación y de la Unidad de Formación e Investigación de Trabajo Social.

Nueva edición del bkUB
Durante su informe, el rector Joan Elias ha querido abordar los diferentes casos de mala praxis que se han sucedido en el sistema universal español. Elias ha remarcado que se trata de casos puntuales y que la UB mantiene y mantendrá una posición de condena delante de cualquier acción de este tipo.

La vicerrectora de Estudiantes y Política Lingüística, Mercè Puig, ha informado de la nueva convocatoria de ayudas bkUB, que este año incorpora, como novedad principal, una partida destinada a dar soporte a los estudiantes de máster universitario a quien haya denegado la beca general para no haber alcanzado la nota media exigida. La Universidad de Barcelona fue pionera en la creación de un programa general de becas que complementara las convocatorias públicas. Cada año, más de 500 estudiantes reciben ayuda económica por parte de la Universidad de Barcelona.