La Ciencia no siempre fue así. Hubo un tiempo en el que los investigadores no pagaban por publicar, en el que las revistas científicas no eran un pingüe negocio y se centraban más en el conocimiento que en los ingresos. Pero una lluvia de dinero, el aumento del volumen de trabajo y por tanto de la carga administrativa y la ambición de Robert Maxwell en la Europa de la posguerra transformaron el sector.